El cannabis en las elecciones del 10 de noviembre. ¿Qué podemos esperar?
El próximo 10 de noviembre estamos llamados a votar, otra vez más, para elegir nuestros representantes a las Cortes Generales. Tenemos que escoger a los 350 diputados del Congreso y a los 208 senadores que se eligen por sufragio universal. Bien sabemos que los programas electorales, son solo esto: programas. Siempre hay un trecho entre aquello dicho en campaña, con aquello que realmente hace el partido ganador (él y sus alianzas). En el caso cannabis, hace años que podemos afirmar que está en la agenda política. Así lo atestigua la multitud de iniciativas autonómicas, como la Iniciativa Legislativa Popular de Navarra y Cataluña, ambas impugnadas por el gobierno central y anuladas por el Tribunal Constitucional. Y, también, las resoluciones de multitud de parlamentos autonómicos que instaban a las Cortes Generales a regular el cannabis, de momento sin resultado alguno. Por tanto, a pesar de que el cannabis ocupa espacio político, aún no termina de prosperar una ley española integral del cannabis que dé cobertura jurídica a las personas consumidoras. La llave que puede abrir España a la legalización la tiene la Cortes Generales. Solo una mayoría parlamentaria solvente puede enfilar la senda de la regulación. Veamos qué propone cada uno de los partidos políticos en materia de cannabis, para así poder concluir, cómo de cerca estamos de alcanzar la legalización en esta legislatura.
Partido Popular
La formación conservadora siempre ha estado en contra de la legalización del cannabis. Solo cabe ver cómo sus seis diputados se quedaron solos votando en contra de la ley catalana de asociaciones cannábicas, aprobada por el Parlament de Cataluña el 28 de junio de 2017 con 118 (de 135) votos a favor. El programa electoral para el 10N no hace ninguna referencia al cannabis. En relación a los psicoactivos, solo alguna vaguedad de prevenir y asistir los problemas adictivos. Pero sí que es claro y conciso cuando afirma que en relación al control de la oferta continuará con las políticas de mano dura. Afirman: “seguiremos apoyando con medios humanos y materiales a las unidades que luchan contra el tráfico de drogas, especialmente en las costas de Andalucía y Galicia”. Nada nuevo bajo el sol.
Ciudadanos
El partido naranja en el momento que mutó de socialdemócrata a liberal aseveró que estaba en su ideario legalizar el cannabis, así como la prostitución. Obvio. El espíritu liberal se abstiene de gobernar las almas en temas de esta naturaleza. Pero, ya sabemos que, en España, por una extraña razón sociohistórica, los autodenominados liberales poseen una inercia que los atrae hacia el conservadurismo. En los últimos dos años la deriva reaccionaria de Ciudadanos ha implicado que la legalización integral del cannabis se transforme en una legalización del cannabis medicinal. Así nos lo atestigua el programa electoral para el 10N en que solo hay una tenue referencia al cannabis medicinal, como la que sigue “regularemos el cannabis de uso terapéutico. Seguiremos las recomendaciones de las sociedades científicas acordes con la evidencia terapéutica.”. Nada más.
Unidas-Podemos
fue el primer partido de ámbito estatal es posicionarse totalmente a favor de la legalización del cannabis. Más allá de algunos políticos morados de ámbito autonómico, el 17 de octubre de 2018, en el marco de una jornada sobre la legalización integral del cannabis, celebrada en la Sala Ernest Lluch del Congreso de los Diputados, el Secretario General, Pablo Iglesias, pedía sin matiz alguno, la legalización integral del cannabis. Éste inquirió agudamente “el debate no es si hay que legalizar el cannabis, sino cuándo y cómo. Y tras ver las experiencias en algunos estados de EEUU, Uruguay y Canadá, creo que a España le conviene mucho ser el primer país europeo en legalizar la marihuana, ser un referente para Europa”. Desde entonces el partido morado ha sido el gran abanderado de la legalización del cannabis en España. Su programa electoral es bien claro: «Despenalizar el cannabis y legalizar su uso con fines medicinales. Despenalizaremos el cultivo y la tenencia de cannabis a nivel personal y colectivo, regularemos la actividad de los clubs sociales de cannabis y estableceremos el rol del Estado en la garantía de seguridad de los y las consumidoras y en el control de la producción, distribución y consumo de cannabis». Claro y conciso.
Más País
La formación de Errejón, recién llegada al escenario partidista español, o más bien dicho, recién escindida, no hace ninguna mención explícita al cánnabis en su programa electoral, centrado con gran celo en temas de igualdad y sostenibilidad. A pesar de esto, bien sabemos que es partidario de la legalización del cannabis, como así lo confirma el artículo publicado el 13 de octubre de 2019 en la Tribuna de El País. Un artículo, firmado por Errejón y Moruno, que constituye un claro alegato a favor de la regulación integral.
Resto de partidos
En relación a los partidos de ámbito autonómico, la tendencia es estar a favor de la legalización. La CUP no hace ninguna mención al cannabis, pero bien recordamos las palabras de Sergi Saladié en el Parlament de Catalunya que clamó “visca catalunya: lliure i cannábica”. ERC siempre ha estado a favor de la legalización, así como EH-Bildu. El PNV-EAJ no apunta ninguna referencia al cannabis en su programa, aunque visto el papel proactivo que tuvo en la ley vasca de adicciones para conocer y regular los clubes sociales de cannabis, cabe esperar que, a la hora de una hipotética votación, el siempre estratégico y decisivo PNV, con su política jelkide, atendrá a razones objetivas y votará a favor.
¿Y el PSOE?
En el programa electoral de las elecciones del 28 de abril de 2019 proponía “constituir una comisión de estudio para abrir un debate en profundidad sobre el conocimiento del cannabis y sus efectos sobre la salud”. Es decir, una propuesta que se ponía de lado, pero, a fin de cuentas, el cannabis estaba en el programa. Ahora constatamos que el PSOE elimina de su programa electoral del 10N cualquier referencia al cannabis Nada. Ni estudio. Ni comisión. Ni posiciones intermedias. Una propuesta política idéntica a la PP: ninguna propuesta. Esta omisión programática del cannabis la podíamos intuir cuando en los últimos meses escuchábamos declaraciones críticas con el cannabis procedentes de la bancada socialista.
El PSOE es el partido que tiene la llave la legalización del cannabis en España. Veremos cual es el resultado de las elecciones del 10N. Las encuestas dicen que ganará el PSOE pero necesitará alianzas. Veremos, si es que se da, cómo se conforma el próximo ejecutivo español, pero, a menos que se dé una hecatombe a nivel internacional que haga recapacitar el PSOE, el cannabis continuará ilegal una legislatura más. Tal vez una hipotética coalición entre el PSOE y Ciudadanos podría regular el cannabis medicinal, pero la verdad, lo dudamos.